Hacer la guerra por tu cuenta, en un sector como la abogacía, te conllevará mucho tiempo, esfuerzo y dinero; y puede que nunca logres llegar al lugar que esperas. Las fórmulas de coworking clásicas tampoco valen del todo para nuestro sector pues el recibir a clientes en despachos alquilados por horas (fríos e impersonales) resta pegada a nuestra marca personal. De ahí que, desde 2015, en MALEY ABOGADOS hayamos optado por un sistema intermedio: MALEY COWNET.